El síndrome de colon o intestino irritable es un trastorno crónico que afecta al intestino grueso.
Y cuando nos toca fuerte, pone «en veremos» nuestra calidad de vida y el estado de ánimo.
Se desconocen las causas de su origen, o mejor dicho, inciden varios factores y aspectos de nuestras vidas que pueden ocasionar este tipo de malestares.
A quienes transitamos la ansiedad, claro que nos interesa.
Aprender y profundizar en temas que desconocemos, nos ayuda a calmar.
Hay algo muy importante para destacar.
Son pocas las personas que padecen consecuencias graves. Sin embargo, son muchísimas las que tienen que lidiar todos los días con algún tipo de síntoma asociado:
- Ciertas intolerancias o restricciones alimentarias.
- Dolores abdominales.
- Preocupación y miedo a salir.
- Abrumadora búsqueda de información que ayude a entender las causas.
- Estrés.
- Ansiedad.
Es un círculo tortuoso que, en muchas ocasiones, se retroalimenta.
Porque los síntomas generan irritabilidad y viceversa.
Conozco infinidad de personas y consultantes que arrastran esta problemática.
Si bien yo las trato desde un enfoque psicoterapéutico, el abordaje integral constituye un gran aliado a la hora de ponernos a trabajar con los pacientes.
De esto se ocupa la Psicogastroenterología, de estudiar las disfunciones que se producen entre el cerebro y el intestino.
Las personas que transitamos ansiedad somos vulnerables a sufrir malestares en el sistema gastrointestinal. Porque el tobogán emocional, de una u otra forma, siempre termina en síntomas físicos.
Por eso, hay algunas cuestiones que deberías saber:
- Es muy importante tener una buena y acertada alimentación porque tiene mucha incidencia en la calidad de vida.
- El perfil de las personas que padecen este síndrome y la relación con ciertos rasgos ansiosos.
- Qué medidas y recaudos podemos tomar para regular los síntomas asociados al estrés y la ansiedad.
- Cuáles son las manifestaciones físicas que genera la ansiedad y sus efectos en el sistema digestivo.
- Una práctica básica de Mindfulness y cómo nos puede ayudar a transitar estos estados de irritación.
En el sistema gastrointestinal viven NEURONAS, y allí reside la conexión entre el cerebro y el sistema digestivo.
Procesos como el estrés y emociones como la ansiedad tienen impacto directo en trastornos funcionales del sistema digestivo, por ejemplo, el de colon irritable.
¿Me seguís?
La clave es el tratamiento multidisciplinario: Gastroenterología, nutrición y espacio terapéutico.
La verdad es que, quienes sufren estos trastornos, tienen una calidad de vida que va desmejorando progresivamente.
Es así, porque se trata de una compleja red de situaciones que se alimentan unas con otras.
Cuando una dolencia física, en este caso digestiva, está asociada a un componente emocional, se producen serios desbalances anímicos, corporales y alimenticios.
Por eso, es importante comenzar un tratamiento que lo aborde desde una perspectiva amplia e integrada.
Los efectos no solo producen dolencias físicas, sino que dañan la vida emocional de quienes los sufren: se empiezan a evitar salidas, se recortan reuniones sociales, se afecta el ritmo y la calidad de las comidas, se pierden la autoestima y la seguridad personal.
Como decía más arriba, lo que tenemos aquí es una multiplicidad de factores que provocan el síndrome de colon irritable.
Y también remarcaba la necesidad de abarcar un tratamiento multidisciplinario, enfocado en la alimentación, la gastroenterología y la psicoterapia.
Técnicas que se utilizan para ayudar a las personas que sufren este tipo de malestares
Estos son algunos de los abordajes profesionales que se implementan y sirven en el tratamiento del síndrome de colon irritable:
- Terapia Cognitivo Conductual
Enfocada en la acción, permite obtener resultados en poco tiempo.
- Hipnosis
Es una técnica muy segura, que provoca un estado alterado de la conciencia (como la relajación o el sueño). Es eficaz en los tratamientos con problemas psicosomáticos y el manejo del dolor.
- EMDR
El modelo EMDR (Eye Movement Desensitation Reprocessing) se utiliza para sobrellevar experiencias difíciles y traumáticas.
- EFT
Se llama técnica de liberación emocional y su gran objetivo es «liberar» a las personas de los malestares emocionales que experimentan.
- PNL (Programación Neurolinguística)
Es un recurso muy eficiente para reconocer los filtros mentales con los cuales nos relacionamos con el mundo.
- Hipoactivación: relajación y respiración consciente.
El objetivo aquí es promover un estado de calma y tranquilidad en las personas.
Es la búsqueda de un estado mental con conciencia plena que nos enseña a estar presentes en el aquí y el ahora.
- Visualización guiada
Por medio de las visualizaciones proyectamos mentalmente los cambios que queremos realizar en nuestra vida. Para conseguirlos, primero tenemos que imaginarlos.
Como verás, es un tema muy complejo que afecta a muchísimas personas.
A veces, no contar con buena información produce desánimo y angustia.
Es importante que sepas que hay un gran abanico de abordajes posibles que pueden ayudar a mejorar las condiciones de vida frente a estos trastornos.
La clave es NO aislarse, informarse y formarse.
Tener una mente activa y positiva para mejorar la calidad de vida,
ES POSIBLE.
¡Hasta la próxima!